8 de mayo de 2009

La culpa es de Fidel


El viernes pasado, Día Internacional del Trabajo -raro que sea Internacional aunque no se celebre en EEUU (vieron que si un equipo gana su torneo nacional de beisbol son Campeones Mundiales, o si ganan el anillo de la NBA son Campeones mundiales)- , trabajé 18 horas (de 9 de la mañana a 3 de la madrugada del día 2).
Mientras eso ocurría, un día precioso se desarrollaba afuera, mis nenes y mi esposa disfrutaban de la plaza, la gente salía a pasear o simplemente a descansar. Solo quedaba el consuelo que no era sábado y aun quedaban 2 días para pasar en familia y desparramarse en el sillón.
Paradojas varias para este día: 1- la antedicha: que no se celebre en EEUU, cuando allí se llevó a cabo la protesta que culminó en tragedia y que desembocara en el pedido mundial por una jornada laboral de 8 horas. 2- que, justamente, haya yo trabajado, y el doble de las 8 horas reclamadas y obtenidas 120 años atrás.
Eso me pasa por trabajar en una multinacional que, aunque europea (los europeos son más proclives a la centro izquierda -salvo excepciones: Merkel, Sarkozy, Berlusconi-), cotiza en NY y esté obsesionada con brindarle cada vez más a esos seres supremos, insaciables y anónimos -por seguridad e impunidad-, conocidos como Los Accionistas.
La sensación de esclavitud y explotación me llevó a defenestrar por un buen rato a la sociedad de consumo actual (lo mismo me ocurre cuando paso por barrios bien -o lo veo a Carlos Slim en las revistas- y me pregunto ¿porqué algunos tantos y otros tan poco? ¿porqué es tan injusta la repartija? ¿para qué un crestiano quiere amarrocar tantos billetes?).
Así estaba yo. Desvelado y con la confusión mental que produce la falta de sueño y el cansacio, creyendo sostener un ladrillo en una mano, una antorcha en otra y la vidriera de un McDonalds frente a mis ojos, en plan AnarcoSocialista y con ganas de iniciar la revolución bolchevique, o asustar a los testaferros del poder, por lo menos.
Esto último me recordó la película Los Edukadores. La recordaba con una sonrisa cómplice, cuando recordé también una frase que pronuncia el ex participante del mayo francés, aburguesado y devenido en CEO (como el personaje de la canción de Sabina "El muro de Berlín"): “ser de izquierda después de los 30 es no tener cerebro y no serlo antes de los 30 es no tener corazón”.
En ese instante me desperté del letargo, casi cuando estaba por tragarme el camión de la basura, y me sinceré: yo elegí estar en un mundo capitalista y rendir pleistecía al señor billete. Me guste o no.
Llegué a casa de madrugada, con las luces apagadas y la familia en el decimotercer sueño. Me recibió la bestia peluda, con ganas de caminar un poco. Lo saqué. Caminaba por Cabildo (vacía, hermosa) junto al animal y elaboré la siguiente listita:

Cosas que no me gustan del capitalismo (y/o sus consecuencias)
- La desigualdad social
- El egoismo
- La explotación
- El deterioro del medio ambiente
- La presión por el Éxito

Cosas que me gustan del capitalismo
- El confort


Y con esto siempre vuelvo al final de Trainspotting:

"Entonces porque hice esto?
Puedo ofrecer un millón de respuestas, todas falsas.
La verdad es que soy una mala persona
Pero eso va a cambiar. Yo voy a cambiar.
Esta es la ultima de una serie de cosas.
Ahora estoy limpio, y estoy en movimiento.
Voy recto y eligiendo la vida.
La estoy eligiendo ya.
Seré como tu.
El trabajo, la familia, el jodido televisor grande...
la lavadora, el auto, el equipo de CD y el abrelatas electrico...
buena salud, colesterol bajo, seguro dental...
hipotecas, primera casa, ropa deportiva, maletas...
traje de tres piezas, bricolaje, teleconcursos, comida basura, niños...
caminatas en el parque, nueve-a-cinco, bueno en el golf...
lavando el auto, eligiendo el suéter, navidades familiares...
pensión, excepción de impuestos, limpiar el desagüe.
comprando, mirando al futuro, el día que mueras".

Y solo me queda retumbando el "Seré como tu". Porque eso me suena a Gente Común. Y eso me suena a Pulp, gente poco conforme que nos devuelve el espíritu cuestionador, desde un pop bailable y pegadizo.
Y me quedo pensando ¿Porqué ser socio de esta sociedad? ¿Porqué ser cómplice de esta injusticia? Y, finalmente ¿Qué otra opción tengo? (o ¿qué otra opción quiero tener?).

9 comentarios:

Floripondia dijo...

Es todo un tema señor. Yo en este momento estoy estudiando el capitalismo y desde el vamos esta medio mal.. pero es la que nos toco, donde nacimos y a donde, lamentablemente, estamos insertos y debemos acomodarnos.

yo dijo...

Hola Jesús!
Tengo las mismas incertidumbres que vos, (pero no tu claridad para explesarlas).
Al conseguir mi primer trabajo hace muchos años me dijeron: "Entraste en el Sistema". ¡Entré en el Sistema! ¿Tengo otra opción? Por más que aborrezca la desigualdad, la explotación, la ley de la selva, el "sálvese quien pueda" ¿Puedo aislarme?
Por otro lado,con los réditos del Sistema accedo a sus Beneficios: una obra social, obtengo créditos, compro en cuotas, etc, etc, etc.

No hay forma de no entrar en el Sistema, para lo bueno y lo malo del mismo.
Besos!

Ludmilla_1973 dijo...

Jesús! qué mescolanza!...a ver...creo que el ser humano es de por sí egoísta y por eso nunca podríamos vivir en un sistema socialista (y mucho menos comunista).
No me asombra que en USA no sea feriado el 1ero de mayo, es un día "socialista" por así decirlo. No sé si sabías que hace unos pocos años atrás, en Francia quisieron proponer trabajar 35 horas semanales. Obviamente no dio resultado por razones que te imaginarás. Hay una peli francesa que relata muy bien el tema, se llama "recursos humanos", te la recomiendo (todavía no entiendo como ganó Sarkozy) y más allá de las 35hs, relata un poco la situación laboral de estas ultimas décadas de todo el mundo, totalmente aplicable a nuestro país y cuántos otros. También te recomiendo "Goodbye Lennin" que actúa el mismo actor de "los edukadores" (qué gordo garca!). El tema laboral es tan complejo...yo desde los 18 a los 29 años cambié muchas veces de trabajo, 1 año acá, otro por allá...y así fui sumando experiencia, no solo en mi profesión, sino también en el cruel mundo laboral y patronal. En 2002 me dieron una patada en el tujes y me echaron, nada más y nada menos porque, junto a 2 personas más, nos quejábamos que nos pagaban con un mes de retraso, nos debían aguinaldo, nos habían bajado los sueldos y encima nos hacían ir una hora más temprano. En una empresa de casi 70 personas, solo nos quejábamos 3! (nos quejábamos dando la cara, claro está que todos se quejaban) Los dueños después venían con la marca de los anteojos en la cara de esquiar en Bariloche, puaj. Creo que desde ese momento decidí no lidiar más con ese tipo gente...sino me iba a terminar atrincherando dentro de una empresa. Hoy por hoy no tengo aguinaldo, me pago yo misma la jubilación y la obra social, pero gané en paz y tranquilidad...
El capitalismo me pegó por el lado del estómago y debo admitir, sin vergüenza alguna, que soy fan de mc donalds!, perdón por la vulgaridad de este comentario, pero, clavarme un big mac al mediodía es un placer...!

Ludmilla_1973 dijo...

Aclaración: el actor de goodbye lennin no es el gordo garca, es el pibe que se enamora de la novia de su amigo...Actor reconocido en Alemania. Buen finde !

cata dijo...

jesus, tocaste mi tema preferido... yo por el unico motivo que sigo adentro del sistema es por mis hijas porque me parece que para un adulto estaria bueno, pero para los niños no. Ademas tengo una cuota enorme de agradecimiento a este sistema que me perimito ser una profesional estudiando en una univerdad estatal sin poner un mango con los impuestos de todos... no se, es como vos decis yo en casa tengo calefaccion central y no lo cambio por nada, pero trato todos los dias de mi vida consumir la menor cantidad de cosas posibles. Tambien por ahi pienso en salirme del sistema pero es un poco hipocrita porque en el fondo se que tengo la suerte de ser una futura heredera de algo con lo que tengo asegurada mi vejez.. asi cualquiera.

Alejandroooo dijo...

El capitalismo es un excelente sistema. Por supuesto que el capitalismo a la argentina no funciona satisfactoriamente pero eso es así porque nosotros vulneramos todas las reglas que tornan beneficioso al capitalismo. En Argentina, el problema no es el capitalismo sino que no aplicamos apropiadamente sus principios. Los sistemas socializantes que preconizan una distribución equitativa de la riqueza son injustos porque los que no trabajan en nada productivo se benefician del esfuerzo de quienes sí lo hacen. De ese modo, se estimula la improductividad y, en consecuencia, el empobrecimiento generalizado. Eso es, de hecho, lo que ha sucedido en todos los lugares donde el socialismo fue aplicado. Sería bueno que, en lugar de perder el tiempo criticando al capitalismo, nos planteemos de qué modo lo podemos mejorar, porque ése sí es un camino promisorio. Todo lo demás es perder el tiempo porque mientras algunos dedican sus esfuerzos a criticar el capitalismo, ese sistema sigue demostrando, de hecho, que es el mejor que se ha conocido. Saludos.

Anónimo dijo...

Excelente!!Tu exposición acerca del sempiterno disconformismo tan carácterístico de nuestra especie fue brillante!!!Amigo Jesús: extrañaba sus palabras. Qué bueno que haya actualizado el kioski!!!

Jesús dijo...

Flora: si me das a opinar, desde -y hasta- el vamos, la cosa van para atrás con el Capitalismo. Y sí, es el lodo donde estamos todos manoseados.

Mavi: no sé si fuí muy claro, pero agradezco tus palabras. Ahora, fijate vos que la Obra Social no es logro del Sistema, sino de los marginales del Sistemas.

Ludmi: hablando de películas, ví Recursos Humanos y (del mismo director) El empleo del tiempo. Ahora hizo la peli Entre Muros (o La Clase) y se mete con el tema de la educación en la Francia actual. Good Bye Lenin es maravillosa. Y sí, el pibe es el mismo.

Cata: la universidad pública es otro logro de los marginales. Si fuésemos Capitalistas 100%, todas nuestras universidades serían privadas y nos saldría un ojo de la cara poder estudiar (como lo es en los EEUU).

Ale: creo que el sesgo está en que tomamos como aplicaciones socialistas a las dictaduras burocráticas-comunistas. Pienso que la mejor forma de mejorar el capitalismo es inyectándole cuotas de socialismo.

Anónima (Euge?): sempiterno (!) Qué linda palabra!

Gracias a todos por dejar sus comentarios. Disculpen la demora de mis respuestas.
Saludos

Alejandroooo dijo...

Eso que vos decís, inocularle dosis de socialismo al capitalismo es lo que la Argentina viene haciendo desde hace 60 o 70 años, con los resultados que todos conocemos. La solución acertada es exactamente la opuesta. La forma de mejorar el capitalismo es ampliando su margen de operatividad, es decir profundizando sus fundamentos.